martes, 19 de septiembre de 2017

MERCADILLO

Los mercadillos semanales o mensuales son una fuente muy interesante de material,se pueden encontrar multitud de piezas muy específicas que en un rastro o incluso en el DS ya no puede uno conseguir. Nosotros no tenemos la suerte de contar con ello tan cerca, solo de vez en cuando podemos acudir a alguno pero mucho más modesto que al que hemos ido este fin de semana en Madrid.

Nos hemos escapado hasta Aluche en una mañana muy entretenida de la que hemos regresado con unos cuantos muñecos y piezas. Muchísima más variedad y cantidad de puestos y material, con una primera impresión muy buena, se puede volver uno loco, pero luego uno se va dando cuenta de que sigue una misma linea. No quiero decir que fuese una decepción, regresamos muy contentos, pero sí que personalmente esperaba un poquito más.


La superioridad en material es más que evidente pero hay un sistema menos económico de muñecos en "bolsita" excesivo que veo que se repite incansablemente. Así como el monopolio del City y Medieval en los pocos cajones donde se puede revolver. Están de suerte los amantes de estos temas, es exagerada la diferencia que hay de oferta de piezas de estas dos temáticas frente al Oeste por ejemplo. Para muestra un botón. 


Metidos en harina un par de horas, estuvimos muy centrados sobre todo en los kekos a un euro y los pocos puestos que contaban con todo un despliegue de despiece. Sencillamente impresionante, me encantó y lo disfruté. Ahí me di cuenta lo fácil que tienen algunos el conseguir piezas que para nosotros eran prácticamente inalcanzables, una gozada. Precios muy variados pero en muchos casos razonables y creo que lo hemos sabido aprovechar para mejorar algunas personalizaciones sin gastar demasiado.


Como no tenemos las fotos de las compras porque está todo ya desperdigado o guardado, mencionar que para nosotros, la compra "estrella", fue algo a lo que teníamos ya muchas ganas y estaba bien de precio, el puente levadizo del 3666. Tenemos que completar simplemente un par de detalles que tenemos y listo. 


En definitiva, volví con muy buen sabor de boca y con ganas de repetir porque tanto el ambiente, como la calidad del material (a pesar de sus precios) y el relacionarse con la gente del mundillo es de un valor incuestionable. Ahora toca jugar y customizar, calculo que tenemos para bastante tiempo.

2 comentarios:

  1. Me encanta leer esta revisión de una visita al mercadillo. Al de Aluche solamente he ido una vez, nos queda muy lejos, lo organizan los mismos que el de la Ermita del Santo (TOY MARKET) y tiene más o menos los mismos puestos. Leyendo tu punto de vista, puede que hayamos sido injustos cuando lo hemos criticado con tanta vehemencia en nuestras entradas. Es cierto que se pueden encontrar piezas que resultan imposibles (o muy difíciles) de conseguir en otros lugares y circunstancias. Es cierto que es fácil quejarse cuando tienes tres oportunidades de ir a un mercadillo al mes. Y eso debería ser suficiente (y lo es, puesto que nosotros seguimos visitándolos) para valorarlo positivamente. Tienes toda la razón respecto a que las apariencias engañan. Desde luego hay de todo… si estás dispuesto a pagarlo y hay oportunidades muy baratas también. En mi opinión, y me alegra que coincidas, se está abusando en exceso de las “figuras en bolsita”, pero seguro que los vendedores tienen alguna razón poderosa cuando así lo hacen. Si tienes oportunidad, visita el Mercadillo de la Estación (https://es-es.facebook.com/Feriadelaestacion-262733763932884/), que se celebra mensualmente en el Museo del Ferrocarril y que, siendo parecido, tiene otros puestos y planteamiento. Suele coincidir en fechas con el de la Ermita y así puedes comparar dos en un solo día. Un placer pasar por aquí. Un saludo

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  2. Hola Playmoblogger! No creo que fueseis injustos en ninguna de vuestras entradas relacionadas con los mercadillos, simplemente habéis descrito vuestras compras y experiencia de semana tras semana, y como todo en esta vida, el que acude frecuentemente a algo, se encuentra con días mejores y días peores. Por cierto me gustaban mucho.

    A ver si nos escapamos en otra ocasión a ese del Ferrocarril. Un saludo

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